Brackets de autoligado

Por qué debería escoger brackets de autoligado?

Porque priorizamos las sonrisas naturales y plenas, logradas por la acción de fuerzas ligeras que respetan los principios biológicos.

Las mecánicas de baja fricción están concebidos para mejorar el aspecto facial general de los pacientes, intentando evitar extracciones.


Como en el caso de los siguientes pacientes:

Caso 4: Clase II bilateral.

Caso 18: Apiñamiento severo.

Caso 21: Arcadas dentales estrechadas.


Los profesionales que utilizamos estos sistemas nos basamos en tres elementos clave, que tienen por objetivo un tratamiento más corto y con menor cantidad de visitas para el paciente:

  1. Brackets de autoligado: Eliminan la necesidad de colocar ligaduras elastoméricas o metálicas.
  2. Arcos ligeros: De última generación y con memoria de forma que desplazan las piezas dentales más rápidamente y que requieren menos ajustes.
  3. Nuevo enfoque clínico: Normalmente no se realizan extracciones ni se utilizan tantos aparatos auxiliares.

¿Que diferencia hay con los brackets convencionales?

La diferencia principal es que los aparatos tradicionales utilizan ligaduras (elásticas o de metal). Estas mantienen unido el arco a los brackets, ejerciendo presión en la dentadura del paciente.

De esta manera se aumenta el rozamiento entre el bracket y los alambres dificultando el movimiento de los dientes por lo que se tienen que aumentar las fuerzas utilizadas.

Los aparatos de autoligado, en cambio, utilizan un mecanismo de puerta para sujetar el arco que permite a las piezas dentales moverse con mayor libertad (menos fricción), de forma rápida y cómoda.

Permitiéndonos aplicar fuerzas más ligeras y biocompatibles.

El hecho de no tener ligaduras, además de disminuir la fricción, hace que los brackets de autoligado sean más higiénicos que los aparatos convencionales.

¿Es lo mismo autoligado que Damon?

La verdad es que no, aunque mucha gente lo relaciona debido a la excelente acción comercial de sus promotores.

En realidad los brackets Damon (desarrollados por el doctor Dwight Damon) son unos excelentes brackets de autoligado pasivo, pero hay muchos más.

Prácticamente cada casa comercial tiene los suyos propios, existiendo multitud de opciones de gran calidad actualmente.

La elección en última instancia dependerá del ortodoncista que tendrá sus preferencias y estará más familiarizado con unos o con otros.

Lo importante es que el profesional conozca las particularidades de la mecánica y sea capaz de sacarle el máximo partido.

Brackets autoligado
Brackets de autoligado Damon

¿Existen los brackes de autoligado cerámicos?

Si que existen, pueden ser totalmente o parcialmente cerámicos, ya que a veces y según la marca la tapita del bracket es de aleaciones metálicas.

Si bien es verdad que la cerámica aumenta la fricción que se produce con los alambres y, por norma general, a los ortodoncistas no nos gustan tanto como los brackets fabricados integramente en metal.

De todas maneras, si por requerimiento estético del paciente, tenemos que utilizar brackets cerámicos, al menos, que sean estos de autoligado.

De esta manera mantenemos la fricción relativamente baja, en comparación con los brackets cerámicos convencionales que, además, llevan ligaduras.

Brackets de autoligado cerámicos
Brackets de autoligado Damon cerámicos

En resumidas cuentas, podríamos decir que los brackets de autoligado serían una de las mejores opciones a tener en cuenta si optamos por una mecánica de ortodoncia fija por vestibular.

Pero existen alternativas que también tienen sus ventajas, como los alineadores removibles Invisalign.